Alimentos y Estado de Ánimo - Cómo Mejorar tu Bienestar

Se ha escrito mucho sobre el tema de cómo los alimentos que comemos influyen en nuestro estado de ánimo y cómo de gran manera somos lo que comemos. Puedes encontrar una variedad muy extensa de libros y documentos que hablan de este tema tan interesante. Hoy en día creo que todos sabemos que los alimentos y nuestro estado de ánimo están ligados entre sí.

En este artículo hablaré un poco de cuales alimentos nos ayudan a elevar nuestra energía y estado de ánimo y cuáles no lo hacen, enfocándome en llevar una dieta saludable que nos ayude a bajar de peso. En algún artículo anterior (que podrás encontrar aquí en la página) hablamos sobre el poder de la mente en las dietas para bajar de peso y el como el tener una mente determinada a llegar a nuestro objetivo es el principal motor para lograrlo. Por esto la importancia de nutrir a la mente con alimentos que le ayuden a mantenerla positiva, elevada energéticamente y activa.

Algunos Tips De Alimentos Que Ayudan A Aumentar Nuestras Emociones Positivas

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Un ejemplo claro de alimentos que fomentan la felicidad son los que crecieron en el sol, tienden a buscarlo y absorben clorofila de el, estos pueden ser los vegetales de hojas verdes, las manzanas, las peras, las algas, en general las frutas, las verduras, así como los granos. Lo más natural es lo mejor, lo más simple y sencillo.

Por otro lado me gustaría mencionar a los alimentos depresivos, como son el alcohol y las harinas y azúcares muy procesadas. En un inicio estos 2 alimentos nos proporcionan felicidad y elevan nuestro estado de ánimo, sin embargo, en un rato más tarde sentirás que tu cuerpo te pide alimento chatarra después de ingerir alcohol o bien alimentos procesados y pasarás de lo salado a lo dulce en un lapso de tiempo corto. Sugerimos que en la medida de lo posible reducir la ingesta de alcohol pera que no experimentes estos picos altos y bajos en tu estado de ánimo que no te ayudarán a controla tus alimentos ni tampoco las porciones adecuadas.

Los postres, helados, pasteles, todos estos alimentos altos en azúcares refinadas y procesadas tienden a calmar de manera momentánea un antojo, una emoción provocada por tu mente. Esto es normal y todos lo sentimos, pero si podemos hacer algo diferente para que el antojo no nos gane y queramos comernos toda el azúcar de nuestro refrigerados.

Lo que yo hago en estas situaciones es tomarme un minuto y pensar porque estoy sintiendo ese antojo incontrolable, identificar la emoción y ver si realmente lo necesito y lo quiero. Ya que hice esto, puedo decidir conscientemente que comer y que alimento me aportará más nutrientes y sobre todo hará que me sienta mejor emocionalmente a largo plazo.

Otra recomendación es sentarse a comerlo y darle el tiempo y la porción adecuado a ese alimento. En términos generales es hacer conciencia de la emoción para poder tomar las decisiones más inteligentes. Se que esto es difícil al inicio, pero se puede lograr con la práctica y al ver los resultados en nosotras mismas al ver como los alimentos y nuestro estado de ánimo cambian uno con el otro.

Por último me gustaría tratar de tema de las comidas fuera de casa, los restaurantes, reuniones sociales. En estas situaciones es a veces más complicado escoger alimentos que eleven nuestra energía y que nos ayuden a continuar en el camino de lo saludable. Opta por identificar la situación, prepara a tu mente y toma tu tiempo para ver el menú u observar los distintos platos o alimentos que te ofrecen. También puedes compartir un plato con alguien que esté en la reunión, tu esposo, amiga, etc y tratar de siempre consumir ensalada o verdura o algo verde natural. Generalmente hay algo de vegetales en las reuniones fuera de casa y en los restaurantes.